El Che Guevara y los nazis escondidos
El nivel
admirable de Gabriel Ippóliti es recurrente para la historieta europea. Su
trabajo más reciente lo está publicando Fierro, es imperdible, y lo tiene al
Che de protagonista.
Por
Leandro Arteaga
“Enero de 1947, ciudad de La Falda, provincia de Córdoba,
Argentina” se lee en el primero de los cuadritos. Y a continuación: “Era apenas
un niño la última vez que lo vi. ¿Cuánto puede cambiar un muchacho como él en
seis años?”. Quien habla es Helena, una muchacha que espera en el andén ferroviario
la llegada de un joven Ernesto… Guevara. Y a partir de allí, los recuerdos y el
salto en el tiempo hacia 1937, con un escenario que es título para la nueva
historieta del tándem Diego Agrimbau/Gabriel Ippóliti: Edén Hotel.
Se trata de la cuarta colaboración entre el
dibujante santafesino y el guionista de Buenos Aires, precedida por La burbuja de Bertold (2005), El gran lienzo (2006) y Planeta Extra (2009). Todas realizadas
para Europa, con ediciones en varios idiomas y premios internacionales. Las dos
primeras han sido publicadas en Argentina gracias a Historieteca. Y Edén Hotel puede leerse de manera
seriada, actualmente, en las páginas de revista Fierro, que edita Página/12.
Sólo queda, entonces, alquilar una habitación en este hotel de recuerdos,
disponerse a la lectura, y entrever qué oscuros designios son los que guardan estas
paredes legendarias, reducto de nazis refugiados.
“Es una idea que tuvo Agrimbau desde hace un tiempo”
explica Gabriel Ippóliti a Rosario/12.
Fue pensado para Francia y se remonta a la época en la que teníamos contacto
con una editora que nos publicó La Burbuja de Bertold en Albin Michel. Le había
encantado, el trato prácticamente estaba cerrado, pero a último momento el
editor general dijo que no, que no le interesaba y quedó archivado. Al poquito
tiempo, Agrimbau estaba presentando otros trabajos suyos, en busca de editores,
y se los rebotaron todos. Le quedaba la muestra de Edén Hotel, la sacó, y fue la única que interesó. Al poquito tiempo
terminamos por firmar contrato con la editorial Casterman, el libro salió
publicado hace sólo un par de meses en Francia, y ahora en revista Fierro.”
-Creo que las
características de Fierro, en tanto
revista que se vende en kioskos, te debe permitir una relación diferente con el
lector.
-¡El “continuará”! Hubo varios que me comentaron: “¡Me
quedé con la intriga! ¡Quiero saber cómo sigue!”. Eso está bueno, a mí nunca me
había pasado lo del “continuará”.
-Originalmente,
Edén Hotel es una historieta en
color.
-Es en color, y tiene un trabajo bastante
interesante en ese sentido. Lo que pasa es que pensamos que en Fierro se iban a perder mucho ciertas
sutilezas por el método de impresión, y por eso decidimos el blanco y negro. Pero
la verdad es que al trabajarla en blanco y negro, me gustó mucho como queda
también. La ajusté lo más posible, pero vamos viendo sobre la marcha, al ver
cómo va saliendo impresa. La idea, en verdad, fue la de hacer una versión en
blanco y negro pleno, pero después por cuestiones de tiempo no pude realizarla.
-¿Hay
posibilidades de que se publique después de manera íntegra?
-Todavía no tenemos nada, no me enteré de ninguna
posibilidad, pero pienso que sí.
-Me llama la
atención el interés europeo hacia capítulos históricos argentinos. Algo similar
a lo que ocurriera con el álbum que Carlos Trillo y Eduardo Risso tenían
previsto publicar en Francia, sobre el cadáver de Eva Duarte.
-Sí, les interesa y preguntan: ¿Cómo es la historia?
¿El Che Guevara? ¿Nazis? ¿Y qué más sucede? Tanto es así que ya piensan en un
segundo y tercer tomo. Igualmente, se hicieron muchas historias con el Che,
pero lo que tiene ésta es el enfoque de Agrimbau, que la tiene muy clara. Mezcló
un montón de cosas de tal forma que logra que uno se pregunte si lo que está
leyendo pasó o no. Lo cierto es que pudo haber pasado. Es decir, no se trató solamente
de armar un relato por el sólo hecho de meter al Che Guevara.
-Considero que
Agrimbau es alguien que sabe cómo ser verosímil. Pone el acento en el hecho de contar
una historia.
-A mí lo que más me gusta es eso, que me cuenten una
historia. Además, si bien dibujar historieta es un trabajo tedioso, y más con
documentación histórica, lo cierto es que no te aburrís, porque la misma historia
es la que te va llevando, te crea ansiedad. Mientras dibujaba Edén Hotel me pasaba de pensar en cuánto
tiempo me faltaba para llegar a dibujar ciertas páginas. Creo que la historieta
tiene que ser siempre dinámica, nunca densa, o corrés el peligro de que el
lector se aburra.
-Alguien supo
contarle a mi viejo un relato sobre un restaurante en Villa General Belgrano donde,
en plena cena, se cerraron las puertas y, todos de pie, saludaron al mismísimo
Adolf Hitler. Este hombre estaba convencido de lo que decía. El segundo
capítulo de Edén Hotel me lo
recordaba.
-Es que el sustrato de estas historias es cierto, lo
que permite pensar que son muchas las cosas que podrían haber sucedido. Para
este trabajo hicimos un viaje a La
Falda para documentarnos bien, hablamos con gente que tenían
familiares que habían trabajado en el hotel. Las historias están todas ahí, mucha
de la gente todavía está viva, y las relaciones con el nazismo son reales. Los
dueños del hotel -el matrimonio Eichhorn- le mandaban guita a Hitler, eso es
verdad. Ernesto Guevara Lynch vivía en Alta Gracia en esa época, integraba el
Grupo Pro Aliado Acción Argentina, y puede que haya estado en el hotel, pudo
haber sucedido.
-¿Cómo
describirías tu relación de trabajo con Agrimbau?
-Estoy acostumbrado a trabajar con él, más o menos
él me conoce y yo a él. Hemos viajado juntos, hay una relación de confianza. Si
lo tengo que putear lo puteo. “¡Cómo vas a meter tantos personajes en un
cuadro!”, le digo. Pero él también me putea a mí, y eso hace que uno pueda
trabajar más relajado. Si bien reniego cuando hay muchos personajes y las
escenas se vuelven complejas de resolver, sé que después quedan bien, que los
resultados son buenos. A veces, el dibujante de historieta quiere armar la
página como un diseño gráfico, pero cuando hay mucho que poner te tenés que
adaptar al relato, que es lo de verdad importante. Lo que pasa es que el
dibujante quiere lucirse, y con estos guiones a veces no se puede, o por lo
menos yo no puedo. Lo que pasa es que yo no cambio muchas cosas, respeto lo que
el guionista dice pero, como te decía, sé que el resultado finalmente es bueno.
-¿Cuál es el
proyecto que ahora te tiene ocupado?
-Estoy trabajando con un guionista francés, para
Delcourt. Se trata de un trabajo que me encargaron, en una serie de títulos escritos
por el mismo guionista pero con distintos dibujantes. Es una historia que se va
desarrollando a través del tiempo. También me tocó dibujar personajes conocidos,
en este caso a Einstein, en una historia donde hay una secta que trata de
manipular decisiones trascendentales en la historia del mundo para evitar un
Apocalipsis.
3 comentarios:
Excelente
Gran Año para ustedes mis amigos
Saludos
Gracias! Muy feliz año para vos también, y que lo recibas con mucho cine!
Para todos los que nos gusta mucho el cine, es interesante poder conseguir nuevas películas para disfrutar cada semana. Soy de ver mucho cine y cada vez que puedo trato de conocer sobre distintos directores. En este momento me encuentro de vacaciones, sin embargo disfruto de quedarme en los hoteles villa general belgrano, viendo alguna película que engancho
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